viernes, 14 de agosto de 2009

LOS VALORES EN LAS EMPRESAS

Valores de una empresa

Por: Yenny Rodríguez

Los valores son aquellos juicios éticos sobre situaciones imaginarias o reales a los cuales nos sentimos más inclinados por su grado de utilidad personal y social.

Los valores de la empresa son los pilares más importantes de cualquier organización. Con ellos en realidad se define así misma, porque los valores de una organización son los valores de sus miembros, y especialmente los de sus dirigentes.

Los empresarios deben desarrollar virtudes como la templanza, la prudencia, la justicia y la fortaleza para ser transmisores de un verdadero liderazgo.

Los valores deben estar relacionados con la identidad de la empresa.

La identidad es un documento que recoge las variables principales de comportamiento de una organización, así como acontecimientos relevantes de la historia y la trayectoria de ésta.

Cómo definir los valores de una empresa

Lo que hay que hacer primero es establecer los valores fundamentales de la empresa entre el equipo directivo y con la mayor participación de los trabajadores posible. Se recomienda hacer una lista de entre tres y diez valores.

Enseguida se deben imaginar diferentes situaciones en que se pude encontrar la empresa en los próximos cinco años y especificar cuál será el comportamiento en cada caso. En base a lo anterior definir nuevamente el grado de importancia de cada valor de la lista del paso 1 y ordenarlos.

Una vez que se han especificado los valores de la empresa, se debe actuar bajo los mismos como prioritarios. Y ante un conflicto se debe poder razonar de manera lógica y en base a la lista de valores.
Esta actitud hará que los valores sean congruentes con los de los clientes, trabajadores y nosotros mismos.

Finalmente los valores que sobrevivan, serán los de su empresa y con lo que será mucho más claro y fácil matizar su visión y misión.

Valores compartidos

Son los que deben guiar la conducta cotidiana de todos en la empresa para realizar la misión, la visión y la identidad. Constituyen el cimiento de la organización y generan beneficios para las personas y empresas que los aplican.

Para poder establecer los valores compartidos es muy importante el trabajo en equipo y especificar:

Los valores que tiene la organización.

Los valores que no tiene la empresa y necesita tener.

Identificar y eliminar los antivalores de la organización.

LA MOTIVACION EN LAS EMPRESAS

LA MOTIVACIÓN

En todos los ámbitos de la existencia humana interviene la motivación como mecanismo para lograr determinados objetivos y alcanzar determinadas metas; ya que representa un fenómeno humano universal de gran trascendencia para los individuos y la sociedad; es un tema de interés para todos porque puede ser utilizada por el Psicólogo, el filósofo, el educador, y por ende el relacionista público, etc. Por ejemplo: El jefe que necesita "hacer que su gente haga"; el vendedor que se empeña en despertar en los clientes la voluntad de comprar o el padre de familia que cumple con la tarea de estimular la buena conducta de sus hijos.

La motivación es de importancia para cualquier área; sí se aplica en el ámbito laboral, se puede lograr que los empleados motivados, se esfuercen por tener un mejor desempeño en su trabajo. Una persona satisfecha que estima su trabajo, lo transmite y disfruta de atender a sus clientes; si eso no es posible, al menos lo intentará. La motivación consiste fundamentalmente en mantener culturas y valores corporativos que conduzcan a un alto desempeño, por tal motivo se debe pensar ¿qué puede hacer para estimular a los individuos y a los grupos a dar lo mejor de ellos mismos?, en tal forma que favorezca tanto los intereses de la organización como los suyos propios.

Hay que motivar a los empleados, "para que quieran" y "para que puedan" desempeñar satisfactoriamente su trabajo, la "Motivación Laboral" es parte importante en el logro de la eficiencia empresarial, debido a que se ha descubierto que la calidad de los servicios dependen en gran parte de la persona que los brinda.

DEONTOLOGÍA

DEONTOLOGÍA DE LAS RELACIONES PÚBLICAS Y LA COMUNICACIÓN

Por: Yenny Rodríguez Rodríguez

Los códigos deontológicos constituyen un compromiso colectivo expresado por escrito. Unas normas autoimpuestas por la profesión con el objeto de servir de guía moral en el ejercicio de sus actividades. Durante la segunda mitad del siglo XX numerosas profesiones han desarrollado sus códigos deontológicos y profundizados en lo que significaba la ética profesional con la intención de ofrecer un mejor servicio a la sociedad y de dignificar su profesión.

El diccionario de la RAE ofrece la siguiente acepción del término deontología:

“ciencia o tratado de los deberes”. Cuando aplicamos este término al ámbito de la profesión, nos estamos refiriendo a los deberes implícitos en el ejercicio profesional.

La deontología profesional y su expresión concreta en forma de códigos, suponen una consecuencia de un elevado grado de madurez y desarrollo de la profesión que los genera. Para que una profesión esté en condiciones de plantear y expresar un conjunto formal de normas de autorregulación se requiere un profundo conocimiento de cuál es su función social, además de una sólida cohesión del conjunto de profesionales que la ejercen.

No todas las profesiones se encuentran en el grado de madurez requerido para ello y otras están inmersas ahora mismo en ese reto de desarrollar su propia deontología.

Según explica Ferrater Mora -en su Diccionario de Filosofía- deontología encuentra su origen etimológico en el griego con un significado original de “lo obligatorio, lo justo, lo Adecuado”. Y distingue entre “ciencias deontológicas” que estudian como debe ser y “ciencias ontológicas” que estudian el ser como es.

La dificultad de la deontología reside en que sus normas no son heterónomas como sucede con las normas jurídicas que cualquier colectivo está obligado a asumir. Las normas deontológicas son fruto de la propia experiencia, de la reflexión compartida y del consenso. El colectivo se dota de sus propios códigos deontológicos porque considera que de ese modo puede llegar a desarrollar mejor la profesión y cumplir mejor con las funciones que la sociedad les demanda.

Nos parece oportuna la reflexión que Erich Fromm hace en su libro “Ética y psicoanálisis” cuando dice “ser capaz de prestarse atención a uno mismo es requisito previo para tener la capacidad de prestar atención a los demás”. Si el relacionista público no es capaz de definir cómo debería ser su trabajo y su ética profesional es imposible que pueda servir con eficacia y dignidad a la sociedad.

La aparición de los códigos deontológicos en la segunda mitad del siglo XX – de hecho la deontología como ciencia y como termino habían caído en desuso hasta entonces se enmarcan en una consolidación de las democracias y sus principios en los países desarrollados, un impulso de los derechos individuales y sociales, así como una mayor conciencia de la responsabilidad profesional. Estas sociedades experimentan un desarrollo cultural, educativo, económico que paralelamente se traduce en una exigencia a las profesiones de una mayor autoexigencia. Sin embargo, no todas las profesiones, y mucho menos en todos los países, han desarrollado sus códigos deontológicos. La necesidad de un importante nivel de cohesión y compromiso en el colectivo profesional se manifiesta con el desarrollo del asociacionismo profesional y la aparición de asociaciones fuertes capaces de liderar los procesos que se requieren para asumir un código deontológico. Esas asociaciones, por tanto, actúan como motores que impulsan el consenso y compromiso con una serie de normas deontológicas.

Si en determinado ámbito profesional este tipo de asociaciones todavía no se han configurado o bien, las asociaciones existentes presentan una gran desunión, rivalidad, o fragmentación, el desarrollo de un código deontológico es difícil que supere la fase de discusión; casi con toda seguridad el código deontológico no pasará de ser un proyecto.

Para que un código deontológico rija con eficacia no es suficiente su aprobación por determinado grupo de asociaciones o incluso por un Colegio profesional. El código no se materializa, no se convierte en realidad hasta que el conjunto de profesionales que integran ese colectivo lo asumen como suyo y lo aplican en su actividad diaria. Ni siquiera tampoco con esto es suficiente, se requiere que la sociedad perciba que ese código se aplica, una vez el servicio realizado se ajusta a las normas asumidas.

La primera dificultad es la diversidad de denominaciones o términos que son utilizados para referirse al fenómeno de las relaciones públicas o la comunicación en las empresas e instituciones. A las diferentes variantes que se registran en las designaciones terminológicas utilizadas en español debemos añadir las que encontramos en otros idiomas.

Pese a estas diferencias en la forma de denominar que podrían provocar una cierta inconsistencia de este campo de conocimiento, lo cierto es que todos los vocablos se refieren a un mismo concepto, a una misma realidad. Desde la literatura científica de la Relaciones Públicas se han propuesto numerosas definiciones para precisar los fundamentos de esta disciplina. Una de las más aceptadas por los profesionales y científicos de este ámbito es la que propone IPRA (International Public Relations Association) “las relaciones públicas son una actividad de Dirección de carácter permanente y organizado, por la cual una empresa u organismo privado o público pretende conseguir y mantener la comprensión, la simpatía y el concurso de aquellos con los que ella tiene o puede tener relación; en este punto, deberá adaptar en lo posible su conducta y a través de una extensa información, obtener una comprensión más eficaz que tenga en cuenta los intereses comunes”. Siguiendo el esquema propuesto por Hugo Aznar (1999) uno de los códigos de conducta suelen tener es:

Recomendatorio, para desempeñar un buen comportamiento; normativo, apuntan la conducta que deben seguir los profesionales si quieren actuar con corrección; y prohibitivo, los actos o modos de actuar que explícitamente no se pueden realizar.

LA COMUNICACIÓN

La comunicación en una etapa de crisis

Por: Yenny Rodríguez

La comunicación institucional en la actualidad siempre tiene que andar con pies de plomo para hacer llegar el mensaje de las gestiones políticas de los Gobiernos en buenas condiciones. El lema es no verse sacudido por las corrientes opositoras que están muy pendientes de cualquier fallo o balanceo que implique una acción incorrecta.

Si esto se da en tiempos de “normalidad”, más difícil se pone la cosa cuando de por medio hay una crisis económica-laboral en la que hay que aplicar todos los recursos posibles para salir airosos del envite, porque la indagación recorre todos los sectores donde pueda recoger la mínima información que de caída a los secretos manejados con mucha astucia e inteligencia en los gobiernos.

Algunos Gobiernos están trabajando duramente para no caer inmerso en una crisis de comunicación institucional. Se miden bien las acciones informativas, y a la vez se busca la transparencia y el gobierno abierto para que el ciudadano sepa en todo momento por dónde va el Ejecutivo en su gestión.

El gobierno de España da una acción de comunicación institucional con resultados positivos. El reto del gobierno de Zapatero es alcanzar la transparencia informativa, aprovechando la participación y colaboración de los ciudadanos que, en cierta medida, son los receptores de la gestión política.

Y así como este ejemplo de transparencia debería ir en marcha las gestiones políticas de otros gobiernos, para mantener una comunicación pacifica con el pueblo espectador.

LA INFORMACIÓN ELETRÓNICA EN LAS EMPRESAS

LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN COMO PARTE DE LAS RELACIONES PÚBLICAS
Por: Yenny Rodríguez

Como conocimiento básico debemos saber que las relaciones públicas están enlazadas con la información, pero esta vez estudiaremos la sociedad de la información de una forma capitalizada, que es la razón por la cual se desarrollan las empresas en el mundo.
La sociedad de la información es también de corte industrial, pero, con dominio del capital financiero; su base es corporativa de carácter transnacional, alcance global; cuyo funcionamiento se basa en la electrónica y tecnología de la información, puesto que las organizaciones de carácter innovador han generado la implementación tecnológica para la eficiencia y eficacia de acceso a la información.
Entre sus principales características están:
Establecimiento de un proceso flexible de acumulación de capital; es decir, permite ser manejable no hay congelación de capital.

Permite a la empresa un mercado conectado y con actuación permanente gracias al avance científico-técnico.

Es un sistema flexible de contrato de mano de obra “bajo formas temporales y precarias de ejemplo”.

El capital se globaliza, no se queda en un territorio específico, implica acumulación de tiempo futuro, basado en la confianza (fiducias) y el crédito, y su producción.

En cuento al trabajo, este es local, “desagregado en su desempeño, fragmentado en su organización, discriminado en su existencia y dividido en su acción colectiva”.

El conocimiento es fundamental, se aplica sobre el conocimiento, para dar origen a más conocimiento, lo cual genera la necesidad de control sobre la propiedad intelectual; el campo de las relaciones públicas valora este reconocimiento que se da en la estructura organizativa de las empresas.

El poder genera nuevas relaciones institucionalizadas cuya implementación la realizan agencias multilaterales sin mecanismos supranacionales.

La economía productiva está basada en elementos tangibles: tierra, capital y trabajo, va hacia una economía en la que interviene un factor intangible la información globalizada; como vemos la tecnología permite a la sociedad de la información un desarrollo dentro del sector empresarial, ejecutándose de forma intangible con resultados tangibles, convertida hasta la actualidad en una herramienta de gran poder.
Como comunicadores organizacionales y relacionista público es conveniente inducir a los gerentes de empresas la importancia de implementar la gran sociedad de la información adjunto sus herramientas respectivas “la electrónica y tecnología.

jueves, 13 de agosto de 2009

EL VERDADERO ABANDERADO ES…?

Por: Yenny Rodríguez

“El día del juramento a la Bandera es un evento de respeto incondicional a la patria, en el cual todos los estudiantes que culminan sus estudios primarios y secundarios hacen un rendimiento de honor a ella; adjunto a ello sus padres quienes están en todo momento; orgullosos de los suyos”. Pero la realidad en la mayoría de los casos es otra.

Inconformidad es lo que se vive en algunas entidades educativas, por la injusticia establecida en los reglamentos del ministerio de educación. Estudiantes, padres y madres de familia son quienes lamentan esta situación que se viene dando desde algunos años y que al parecer no es corroborado por parte de las autoridades de las instituciones educativas que dan la cara por los estudiantes y sus padres, para que el gobierno tome cartas en el asunto y ajusten los reglamentos a lo legal.

Como dice el dicho “lo que es del cesar al cesar” es decir; dar a cada quien lo que le corresponde. Y es que el esfuerzo, la creatividad, e inteligencia y dedicación son las voluntades y habilidades que ha demostrado cada becario, el mismo que en este caso está siendo perjudicado al no obtener su correspondiente adecuado. Por todo aquello, es injusticia que las leyes le quiten lo suyo, por el sólo hecho de no haber cursado los seis años en un solo establecimiento educativo de la provincia en la cual vive, como si ellos fueran culpables de las dificultades circunstanciales que deben enfrentarse en la vida. Por ejemplo; la inmigración por cuestión de trabajo de sus padres, y así miles de situaciones que impiden la estabilidad permanente de radicarse en un lugar fijo.

Las leyes no deben acoplarse a las distancias, ni exigir estabilidad al estudiante de cursar todos los años en un solo establecimiento educativo, sino a lo justo de dar a cada quien lo que se ganó con su esmero y trabajo, porque las personas somos las mismas vayan donde vayan estén donde estén.

Con todo el daño causado hasta el momento en su mayoría, esperemos que las cosas cambien para bien del estudiantado, ya que esto origina malestar en el sector educativo, tanto de padres hacia maestros y de maestros al ministerio de educación y no olvidar lo más importante “el perjuicio directo a los estudiantes” que se ha generado durante algún tiempo hasta la actualidad sin dar solución alguna.

Con lo mencionado concluyo diciendo que el verdadero abanderado es, el que mayor nota haya obtenido, sin condiciones de las instituciones donde ha cursado sus años de estudios y mas aún, ahora que se ha implementado un mismo nivel de educación.

martes, 11 de agosto de 2009

Los objetivos en las empresas

Definición de Objetivos en las empresas

“Toda organización pretende alcanzar objetivos”
Por: Yenny Rodríguez

Un objetivo organizacional es una situación deseada que la empresa intenta lograr, es una imagen que la organización pretende para el futuro. Al alcanzar el objetivo, la imagen deja de ser ideal y se convierte en real y actual, por lo tanto, el objetivo deja de ser deseado y se busca otro para ser alcanzado.
Algunas definiciones de la palabra objetivos:
1º. La palabra objetivo proviene de ob-jactum, que significa "a donde se dirigen nuestras acciones”.
2º. Los objetivos son enunciados escritos sobre resultados a ser alcanzados en un periodo determinado.
3º. Los objetivos son los fines hacia los cuales está encaminada la actividad de una empresa, los puntos finales de la planeación, y aun cuando no pueden aceptarse tal cual son, el establecerlos requiere de una considerable planeación.
4º. Un objetivo se concibe algunas veces como el punto final de un programa administrativo, bien sea que se establezca en términos generales o específicos.
5º. Los objetivos tienen jerarquías, y también forman una red de resultados y eventos deseados. Una compañía u otra empresa es un sistema. Si las metas no están interconectadas y se sustentan mutuamente, la gente seguirá caminos que pueden parecer buenos para su propia función pero que pueden ser dañinos para la compañía como un todo.
6º. Estos objetivos deben ser racionalmente alcanzables y deben estar en función de la estrategia que se elija.
7º. Los objetivos son una obligación que se impone una empresa por que es necesaria, esencial para su existencia.

FUNCIONES DE LOS OBJETIVOS ORGANIZACIONALES
a. Presentación de una situación futura: Se establecen objetivos que sirven como una guía para la etapa de ejecución de las acciones.
b. Fuente de legitimidad: los objetivos justifican las actividades de una empresa, son los que dan validez a sus funciones.
c. Sirven como estándares: para evaluar las acciones y la eficacia de la organización.
d. Unidad de medida: para verificar la eficiencia y comparar la productividad de la organización, porque se trazan un tiempo para cada actividad.
La estructura de los objetivos establece la base de relación entre la organización y su Medio ambiente. Es preferible establecer varios objetivos para satisfacer la totalidad de necesidades de la empresa.
Los objetivos no son estáticos, pues están en continua evolución, modificando la relación de la empresa con su medio ambiente. Por ello, es necesario revisar continuamente la estructura de los objetivos frente a las alteraciones del medio ambiente y de la organización.

TIPOS DE OBJETIVOS
De acuerdo con la naturaleza de la organización podemos identificar objetivos con o sin ánimo de lucro.
Según el alcance en el tiempo podemos definir los objetivos en:
Generales o largo plazo
El táctico o mediano plazo y
El operacional o corto plazo.
Largo Plazo: están basados en las especificaciones de los objetivos, son notablemente más especulativos para los años distantes que para el futuro inmediato. Los objetivos de largo plazo son llamados también los objetivos estratégicos en una empresa. Estos objetivos se hacen en un periodo de 5 años y mínimo tres años. Los objetivos estratégicos sirven para definir el futuro del negocio.
Sobre los objetivos generales de una empresa:
• Consolidación del patrimonio.
• Mejoramiento de la tecnología de punta.
• Crecimiento sostenido.
• Reducción de la cartera en mora.
• Integración con los socios y la sociedad
• Capacitación y mejoramiento del personal

Mediano plazo: son los objetivos tácticos de la empresa y se basan en función al objetivo general de la organización. También son llamados los objetivos tácticos ya que son los objetivos formales de la empresa y se fijan por áreas para ayudar a ésta a lograr su propósito.
Corto plazo: son los objetivos que se van a realizar en menos un periodo menor a un año, también son llamados los objetivos individuales o los objetivos operacionales de la empresa ya que son los objetivos que cada empleado quisiera alcanzar con su actividad dentro de la empresa. Así, para que los objetivos a corto plazo puedan contribuir al logro de los objetivos a plazos intermedios y largo, es necesario establecer un plan para cumplir con cada objetivo y para combinarlos dentro de un plan maestro que deberá ser revisado en términos de lógica, consistencia y practicabilidad.

OBJETIVOS ESTRATÉGICOS

“Estrategias, metas y políticas”.

Los Objetivos Estratégicos son resultados que, a largo plazo, la empresa espera alcanzar, realizando acciones que le permitan cumplir con su misión, eso quiere decir, que cuando se hable de un objetivo estratégico estamos halando de un resultado que queremos alcanzar a largo plazo (más de un año) inspirados en la visión para cumplir con la Misión.
Los Objetivos Estratégicos suministran dirección, ayudan en la evaluación, son generadores de sinergia, son reveladores de prioridades y permiten la coordinación siendo esenciales para las actividades de control, motivación, organización y planificación efectivas.
-Los Objetivos Estratégicos deben ser, siempre Cuantificables, Realizables en cantidad y calidad, Comprensibles, Estimulantes, Coherentes y escritos en forma jerárquica preferentemente.

Cuantificables: Ejemplo: nuestro objetivo es incrementar las ventas en 10.000 quetzales este año, a 50,000 quetzales en 5 años, a partir de ahora. Nos damos cuenta que estamos diciendo que esperamos que ocurra y cuándo.

Realizables: deben ser posibles de alcanzar prácticos y realistas. No tiene sentido diseñar un objetivo estratégico que uno de antemano sabe que no se podrá alcanzar.
Comprensibles: nos referimos a que deben estar escritos con palabras muy sencillas y que deben de ser comprendidos fundamentalmente por quienes están involucrados en su logro.

Motivadores: deben de estimular a la mayor productividad.

Definiciones
Objetivo Estratégicos: expectativa que se ha generado como consecuencia del análisis interno y externo con vista a la misión.

Estrategia: la entendemos como la acción para alcanzar el objetivo estratégico. La formulación de una estrategia es una actividad puramente intelectual mientras que la ejecución o implementación son de tipo operativo.

Metas: Objetivos a corto plazo (menos de un año).

Política: Acción para alcanzar las metas.

Es necesario escribir el plan estratégico. Existen varias opciones, que quedan al gusto del grupo, puede ser vertical colocando los objetivos estratégicos y hacia abajo las estrategias, metas y políticas, o puede realizarle horizontalmente. Lo último en el plan estratégico es construir una red.

Ejemplo de Objetivos Estratégico, Estrategias, Metas y Políticas

OBJETIVO ESTRATEGICO 1.
En el plazo de dos años, contado a partir del 1 de julio del presente año, debemos generar, como mínimo, cuatro productos nuevos o realizar cambios substanciales a los existentes, con el objetivo de mejorar la rentabilidad de los planes y satisfacer mejor las necesidades de nuestros clientes.
ESTRATEGIA. Hacer una investigación de las necesidades del mercado. Aprovechar el respaldo técnico de nuestros reaseguradores y utilizar los servicios de una asesoría externa y la capacidad técnica del área.

META 1. Antes del 31 de agosto del 2,000, deberá tenerse terminado el plan escolar, comercializable en los colegios.
POLITICA. El subgerente de beneficios para empleados a través del jefe del seguro de grupo desarrollara todos los requerimientos técnicos y administrativos para el plan.
Deberá contratar tanto los servicios de un programador para desarrollar el software de propuestas, como los de un publicista de apoyo.

META 2. Antes del 31 de diciembre del 2000, deberá terminarse un nuevo plan para vida individual.
POLITICA. El subgerente de vida individual desarrollará el diseño del plan, para lo cual podrá contratar los servicios de un consultor.